Para poder construir, primero es necesario haber desarrollado la primera etapa manipulativa con las manos: poner una pieza encima de otra, tocarlos, apilarlos. La madurez lleva a los pequeños/as a querer construir lo que imaginan.
Los juegos de construcción permiten juntar piezas para construir un todo: abalorios, puzles, construcciones tridimensionales de todo tipo, etc.
Los juegos de construcción abren un mundo de posibilidades porque es como aprendemos todo lo relacionado con la organización y orientación espacial: conceptos como delante, detrás, izquierda, derecha, arriba, abajo… Fomentan la creatividad, ayudan a generar y superar retos, solucionar problemas, hacerse preguntas. Contribuyen a desarrollar la psicomotricidad y la coordinación ojo-mano.
Aquí tenemos a los pequeños del aula de 1-2 años grande investigando a través de los juegos de construcción.
omotricidad y la coordinación ojo-mano.
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